El desapego es una de las practicas más complicadas del ser humano, sin embargo, es de las más liberadoras, tal vez la palabra desapego te suene a un egoísmo emocional, puesto que se trata de dejar todo lo que nos cause una dependencia a un objeto o a una persona. Nada mejor que se la palabra desapego se entienda como crecimiento personal, puesto que supone un gran valor y esfuerzo interior que todos deberíamos de aprender a desarrollar. 

Es importante recalcar que la palabra desapego no tiene que ver con dejar a un lado todo lo que sea importante para nosotros.

Los mejores consejos para tener un buen desapego son las siguientes, pero a estas se les conoce como leyes del desapego.

Primera ley del desapego: eres responsable de ti

Nadie va a resolver tus problemas, al igual que nadie va a respirar por ti, solo tú vas a ser responsable de resolver las cosas que se te presente en la vida.

Segunda ley: vive el presente, acepta las cosas con humildad y asume la realidad

Nada es para siempre, así que lo más saludable es que no tomes las cosas personales nunca, por más difíciles que sean los problemas, déjalo fluir.

Tercera ley: promueve tu libertad y permite ser libres también a los demás

En otras palabras, vive y deja vivir. No hay nada más sano que las personas dejen ser libres a los demás, sin ataduras, no te metas en lo que no es un proceso en tu vida.

Cuarta ley: asume que las perdidas van a pasar tarde o temprano

Este paso significa regresarnos a un punto previo donde nos explica que todo tarde o temprano tiene un fin.