Ciudad Juárez.-Un escenario realmente apocalíptico es lo que se vive tras la grave sequía en la laguna de Bustillos, Chihuahua. Esta sequía ha provocado la muerte masiva de peces, que ahora han quedado a la intemperie, donde antes era una laguna llena de vida.

El impacto no se detiene ahí. El ganado de la región también está muriendo por falta de agua y alimento, agravando la crisis en el sector agropecuario. Los habitantes, desesperados, están abandonando la zona en busca de algo sustentable para ellos y sus familias.

Las autoridades locales y nacionales se encuentran en alerta máxima, buscando soluciones urgentes para mitigar los efectos devastadores de esta sequía que amenaza la subsistencia de la comunidad y el equilibrio ecológico de la región.